Michael Connelly
415 páginas
Thriller
Orion Books
Aunque forma parte de una serie, este libro puede leerse de manera independiente. En esta entrega, seguimos la historia de Harry Bosch, quien, tras su retiro, colabora con la policía de San Fernando en el área de casos sin resolver. Sin embargo, su experiencia lo lleva a ser requerido para investigar un doble crimen que apunta a ser más que un caso común, involucrando bandas organizadas en el peligroso mundo del tráfico ilegal. Además, un antiguo caso de los años 80 resurge con fuerza, ya que se pide reabrirlo para evitar la pena capital. Se acusa a Bosch de mala praxis, alegando que ignoró pruebas clave y que el principal elemento de condena fue plantado por la policía.
A partir de aquí, el libro se desarrolla con un ritmo vertiginoso. Por un lado, Bosch debe liderar una operación urgente para evitar más víctimas; por otro, se enfrenta a proteger su reputación, evitando que una investigación en su contra desencadene una avalancha de solicitudes para reabrir otros casos que supervisó.
Sobre la escritura de Michael Connelly, debo decir que esta vez fue una grata sorpresa. Anteriormente había leído uno de sus libros que no terminó de convencerme, por lo que este había estado en mi estantería desde 2023 esperando su turno. Sin embargo, tenía grandes expectativas, ya que El abogado Lincoln me encantó y esperaba que este libro tuviera un toque similar. ¡Y vaya que lo tuvo! Además, hace una aparición Mickey Haller, el mismísimo abogado (y con un detalle fascinante que no conocía), lo que me ha animado a continuar explorando esta serie.
El ritmo del libro es bastante acelerado, pero no resulta abrumador. Los eventos se suceden rápidamente, pero están bien organizados y diferenciados, con una cronología perfectamente hilada. Los capítulos cortos contribuyen a que la lectura sea ágil y fluida.
En cuanto a los personajes, están muy bien construidos. El cameo de Haller fue un detalle que me encantó. También destaco la elaboración de los antagonistas: sus motivaciones y relaciones son muy interesantes. Aunque el desenlace de la trama se intuye en ciertos puntos, Connelly logra sorprender con algunos giros, manteniéndose dentro de los límites de lo plausible y satisfaciendo al lector.
Lamentablemente, este libro aún no está traducido al español. Sin embargo, dado que muchas de las obras de Connelly ya están disponibles en nuestro idioma y que recientemente se publicó en francés, no descartaría que eventualmente llegue también a los lectores hispanohablantes.
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