Rayuela
- Maux
- 7 feb
- 2 Min. de lectura
405 páginas
Real Academia Española
Contemporánea
Julio Cortazar

Esta es la tercera o cuarta vez que leo este libro, y no tengo dudas: Rayuela es mi libro favorito. No solo por la historia, sino por lo que me hace sentir, por la forma en que me conecta con París, con sus personajes, y, sobre todo, con la Maga, que para mí es el personaje mejor construido de la literatura. Cada encuentro entre ella y Oliveira lo disfruto como si fuera la primera vez.
Así que esto no es una reseña objetiva. Es, simplemente, mi amor por Rayuela plasmado en palabras.
Hablar de Rayuela como si fuera un libro más es quedarse corto. No en vano es un clásico y, al mismo tiempo, una obra revolucionaria. No es solo una historia lineal, sino una experiencia de lectura única. Puedes leerla de dos (o más) formas:De manera tradicional, del capítulo 1 al final, o, siguiendo el orden sugerido por Cortázar, saltando entre capítulos en un recorrido no lineal. En esta relectura, decidí seguir el "Tablero de Dirección", utilizando los capítulos prescindibles, que funcionan como notas y complementos a la historia principal.
¿Y de qué va Rayuela? Es la historia de un grupo de expatriados en París, migrantes que intentan encontrar su lugar en la ciudad. Todo gira en torno a la relación de Oliveira y la Maga, una mujer con ideas claves, madre soltera, que dejó Montevideo con su hijo persiguiendo un sueño. El grupo, mayoritariamente masculino, es intelectual, apasionado por el arte y sediento de conocimiento, algo que se refleja en cada una de sus conversaciones.
¿Recomiendo Rayuela? Sí, pero también no. Es un libro complicado, con personajes difíciles y una prosa que, en mi opinión, es mágica, pero también densa y exigente. No es una lectura para forzarse, sino para dejarse encontrar por ella en el momento adecuado.
Si decides leerlo, te sugiero empezar con la lectura tradicional. Si te atrapa, deja pasar unos meses y vuelve a intentarlo con el orden alternativo. Y si aún quieres más, invéntate tu propia forma de leerlo. Porque, al final, eso es Rayuela: un juego literario que siempre ofrece algo nuevo.
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